Con
la primera parte, lo que pretendía era que se reflexionará sobre una jornada
escolar de un@ docente, que no es fácil, que no tenemos tiempo para nada, poca
ayuda, pocos recursos humanos, además de poca formación sobre Altas Capacidades, pero sí que hay muchas
ganas de ayudar a nuestros niñ@s…
Aunque
a priori, sólo encontremos cosas negativas respecto al cuándo y cómo pasar los test para
la detección en los Centros Educativos, lo que nos debe y os debe quedar claro
es que primero son ell@s, necesitan esta ayuda y cuánto antes mejor, seguro que
unos minutos, un pequeño espacio en nuestra agenda podremos encontrar para
ayudar a ese alumn@ que tanto nos necesita.
Somos
criticad@s en muchas ocasiones, por las familias, pero no tod@s l@s docentes
somos iguales, algunos la implicación es máxima y sin pedir nada a cambio.
Os
aconsejo padres y madres que busquéis al docente, que le hagáis llegar vuestro
sufrimiento, que seguro os escuchará y ayudará, que un buen docente se quiere a sus alumn@s por encima de todo,
que si ell@s sufren, el docente también.
Pensar que conseguir que los niñ@s estén felices
en el Centro Educativo y deseen volver al día siguiente, es lo mejor que te
puede pasar como profesional de la educación.
¡Gracias
por vuestros minutos de lectura!
